Me vendieron un apartamento de cuatro estrellas, y me encontré con un apartamento IKEA con suciedad por donde mirase. Había contratado para cuatro personas, con dos habitaciones, y nos alojaron en una habitación y un salón con sofá cama, el cuál cuando se abría quedaba una cama de 90 cm y otra de 80 cm.
HORRIBLE, porque esta última el colchón era colchoneta fina....
La atención del personal a la entrega de llaves, fue poco menos que una patada en el trasero y fuera...., donde esta la cortesía inglesa? desde luego yo no la he vivido en este lugar.
Lo único favorable que tienen estos apartamentos es que están bien situados, cerca del London Eye, Torre Bridge, Ayuntamiento, etc ...
Cuando vuelva a Londres buscaré otro alojamiento, no merecen la pena, lo tengo claro!