Desde el momento del check in el señor del front desk tuvo una actitud distante y cero amable, la habitación es pequeña, la ducha se demoró casi 5 min para poder calentar el agua, las sabanas tenían rotos, el aire acondicionado no parece funcionar, solo suena para estorbar al dormir. Solicite un room service y la persona que me atendió tuvo la misma actitud de pocos amigos y solo quería salir de mi solicitud. Pedí un Rappi y cuando llego, al parecer no había alguien de seguridad para acompañarlo a mi habitación y la persona del front desk que fue la misma que me hizo el check in, me dijo que Nadir podía ayudarme a acompañar la persona de Rappi, de modo que me tocaba bajar a mi, siendo las 9:30pm y sabiendo que alguien del staff del hotel acababa de subirme el room service. La verdad es un hotel que no volveré a utilizar. No vale la pena ni el hotel ni su staff.