Recomiendo que eviten este hotel por lo siguiente que personalmente viví:
1.- En esta oportunidad pague por 4 habitaciones, cuales al momento de llegar son designadas, al pasar dos días, me percato que la habitación cual ya había pagado, y por motivos personales no era utilizada continuamente, el hotel se la había entregado a otra persona, cual también paga por su habitación correspondiente.
Al percatarme de la situación el hotel me responde que las habitaciones el hotel dispone libertad de cambiarlas a su antojo y me pueden entregar otra si gusto, a mi parecer es un atropello y abuso, considerando que fue pagada en su totalidad esta habitación, y luego el hotel ingresa a otras personas.
2.- Estado de las habitaciones deja mucho que desear, paredes sucias y pintura se sale de las paredes, enchufes de las paredes no funcionan, de dos lamparas velador que existen solo funciona una.
3.- Habitaciones no poseen secador de pelo, si se desea uno, se debe esperar que se desocupen y esperar hasta el siguiente día para poder usarlo, un sencillo accesorio de bajo costo como este debería estar en todas las habitaciones y no tener que anotarse en recepción para ver si es posible poder tener uno.
4.- No hay aire acondicionado, con los calores que hay en Mendoza en verano, un ventilador de techo no es suficiente.
5.- Tamaño de las habitaciones, muy pequeñas de las cuatro habitaciones pagadas, dos son de un tamaño que solo permiten que exista una cama y dos veladores a la pared